En el post de hoy hablamos sobre el reciclaje. Y es que en estos días se celebra la Semana Europea de la Movilidad. Esta tiene como objetivo sensibilizar a la ciudadanía sobre el daño que hace a la salud y al medio ambiente el uso de los coches. Pero, como ya comentamos en artículos anteriores, no somos conscientes de la contaminación de algunos edificios. Es por ello, que hoy nos centraremos en hablar de un proyecto innovador que nos llega desde México.
Ecoplástico ha convertido botellas, tapas y bolsas de plástico en paredes y techos de casas ecológicas. Así, se busca contribuir a la sostenibilidad y disminuir la cantidad de desechos marinos. Una propuesta sana, sustentable, ecológica y sobre todo va dirigida a cualquier ámbito de la sociedad.
La basura plástica que va a los mares y ríos puede tener un destino más amigable y servir como una vivienda que además de ser económica, es resistente a terremotos Además, tiene propiedades térmicas y no se degrada ni se estropea como los muros convencionales.
Tal y como comentan desde Ecoplástico, el resultado de años de pruebas con diferentes polímeros es la “madera plástica”, una lámina altamente resistente que se obtiene de moler los plásticos que usamos todos los días en el hogar.
De plástico a madera
Todos estos elementos son tratados y fundidos en máquinas especiales. Tras este proceso, se obtiene una placa multicolor, lisa y capaz de soportar toneladas de peso. Además, esta será modificada según las necesidades de la casa que se vaya a construir.
El material resultante tarda en calentarse, por lo que las paredes mantienen un ambiente fresco dentro de la casa. Así, se evita el uso de ventiladores o aire acondicionado que generan más gases de efecto invernadero. Una casa de este material es 30 % más económica en comparación con las convencionales, y requiere un mantenimiento mínimo.
La mezcla del material reciclado solo es evidente en áreas como las paredes del baño o una habitación en la que la textura y los colores naturales de la placa sirven como decoración.
El tiempo que tarda el plástico para degradarse en el ambiente y por lo que es considerado una amenaza para el planeta es, en este caso, su mayor ventaja. Y, es que, al menos, tardará 150 años en empezar a deteriorarse.
Si quieres pner tu granito de arena, recuerda de tirar tus plásticos en el cubo amarillo de reciclaje.