La sostenibilidad en nuestro planeta depende de todos. El sector de la construcción no debe ser menos en la consecución de este logro aportando su granito de arena dentro las posibilidades que tiene. Un elemento clave son los ladrillos ecológicos, y precisamente son ellos los que van a copar el protagonismo a lo largo de las próximas líneas en esta entrada.
¿Qué son los ladrillos ecológicos?
Son bloques de construcción reciclables que se pueden emplear para la construcción de muros, muebles y otras estructuras. Están hechos de una mezcla de cemento, suelo y agua, los cuales se combinan de una forma especial para presentarse posteriormente y se compacta de forma que es aumentada en un 52 % sobre su volumen original.
Tipos de ladrillos ecológicos
Como no todos son iguales, conviene explicar detalladamente los diferentes tipos que existen:
- De cemento: resultan de una mezcla de cemento, tierra y agua. Pueden ser presurizados de forma manual o mecánica. Tienen la capacidad de soportar hasta 6 toneladas de presión. Su producción no necesita de ningún proceso de combustión en horno que sí es habitual para los ladrillos de arcilla.
- De cenizas de carbón: inventados hace un par de décadas por el ingeniero civil Henry Liu, permiten reciclar las cenizas generadas en las centrales térmicas de carbón y obtener ladrillos ecológicos en 10 horas a razón de temperaturas de unos 212º. A diferencia de los convencionales, son más livianos, no necesitan tanta energía al no emplear temperaturas de cocción tan altas y absorben mercurio metálico tóxico del aire.
- Con cáñamo y paja: tienen una dureza parecida a la de los materiales convencionales. No obstante, son frágiles y costosos, pero aíslan muy bien la temperatura del exterior. Ello se traduce en un menor consumo de la calefacción y el aire acondicionado.
De plástico reciclado: adecuados para hacer un muro o una casita pequeña. Se elaboran mediante un procesamiento en el que se reutilizan envases desechables y se unen partículas de tereftalato de polietileno (PET).
¿Qué ventajas tienen?
Entre los múltiples beneficios que se pueden aprovechar del empleo de ladrillos ecológicos se encuentran:
- Ahorro del tiempo de construcción en un 30 % aproximadamente en comparación con la albañilería convencional dado que tienen un diseño de encajamiento modular.
- Las paredes son un 40 % más baratas que las que están hechas con bloques de arcilla cocida o ladrillos.
- Las construcciones son más seguras gracias a una distribución más equilibrada del peso sobre las paredes puesto que las columnas son embutidas en los huecos de los ladrillos.
- Una vida útil más extensa que el ladrillo habitual, hasta el punto de llegar a multiplicarse por 6.
- Aportan aislamiento térmico gracias a que sus huecos forman una especie de cámaras que evitan la penetración, tanto del calor en verano como del frío en otoño e invierno, que se puede producir en la calle en el interior de la vivienda.
- Agua y sombra son suficientes para curar este tipo de materiales, no necesitan leña quemada en hornos que propicie deforestación.
Ya se ha alcanzado el final de este artículo explicativo sobre los ladrillos ecológicos en el blog de Ahijones. Ojalá que sea una gran ayuda y aprendizaje para quienes consultáis la web, y en especial el blog, habitualmente. Hasta la próxima.