El euribor da una alegría a los españoles. En la primera quincena de julio, y por primera vez en muchos años, se situó por debajo de la referencia del -0,25%. Esto abre la puerta a generar las primeras hipotecas gratuitas de la historia.
Y es que, de seguir así hasta fin de mes, los hogares que deban revisar la hipoteca y en su crédito se les aplique un euribor de, como máximo, el 0,25% tendrán buenas noticias: las próximas seis o doce cuotas, según el contrato, las podrán abonar sin intereses.
Si durante junio ya vimos como el interés medio de las hipotecas caía al 2,041%, julio nos trae mejores noticias. El descenso coincide con la nueva Ley hipotecaria, que endurece la concesión de nuevos créditos. Además, esta nueva ley refuerza la protección para los clientes y carga a la banca la mayor parte de los gastos de gestión, como explicamos en posts anteriores.
Hacia las hipotecas fijas
Aunque los bancos están paulatinamente reduciendo su exposición a los tipos variables, primando las hipotecas fijas, el nuevo retroceso del euribor está poniendo en serios problemas su rentabilidad.
De hecho, el brusco giro dado este ya ha tumbado buena parte de los planes estratégicos de la banca, que se enfrentan ahora a un panorama desalentador.
Todo esto parecía impensable hace tres meses, cuando parecía que los mínimos del euribor ya se habían visto y que los tipos de interés irían volviendo progresivamente a niveles más ‘normales’. Muchas entidades todavía están reorientando su estrategia tras la aprobación de la nueva ley hipotecaria.
Ahora solo queda esperar para ver cómo termina el mes de julio con los dedos cruzados. Y es que los españoles podrán ahorrarse mucho dinero, y, probablemente, sea la primera y la última vez que nos encontremos con este panorama.